jueves, 11 de junio de 2009

Autoretrato número uno


“El teatro es la poesí­a que se levanta del libro y se hace humana. Y al hacerse, habla y grita, llora y se desespera. El teatro necesita que los personajes que aparezcan en la escena lleven un traje de poesí­a y al mismo tiempo que se les vean los huesos, la sangre. Han de ser tan humanos, tan horrorosamente trágicos y ligados a la vida y al dí­a con una fuerza tal, que muestren sus traiciones, que se aprecien sus olores y que salga a los labios toda la valentí­a de sus palabras llenas de amor o de ascos.”

Federico Garcí­a Lorca, “Conversaciones literarias: Al habla con Federico Garcí­a Lorca.

sábado, 6 de junio de 2009

Los patios


Qué de cosas maravillosas encierran los patios.

Cuánto color dan los objetos inútiles, las mangueras en desuso, los oxidados tarros de pintura amarillenta y las aves que revolotean en el palito de cas. (Nunca dio cases el palito de cas. Tampoco el árbol de mangas, salvo la vez en que mi mamá lo regañó y esa vez dio mangos pequeñitos, como para que viéramos que daba algo)

¿Cuántos seres viven ahí?




¿Cuántos ojos se desplazarán por la planicie viva para ser aplastados por el pie inquieto que no sospecha lo que ha provocado?

¿Cuánta lluvia tragará la tierra que me mira tender la ropa los domingos?